¿Cada cuánto se lavan las toallas?
Te contamos cómo mantener tus toallas perfectas, sin malos olores ni gérmenes y a tu familia protegida
- bacterias
- virus
- ácaros
- pelos
- suciedad
- polvo
- restos de cremas
- piel muerta
- secreciones (sudor, saliva)
- restos de maquillaje
- caspa
- y un largo etcétera
Frecuencia de lavado
No hay una regla infalible pero podríamos decir que una frecuencia adecuada de lavado podría ser cada dos usos. Eso sí, siempre que utilicemos la toalla y no "nos toque" lavarla, debemos extenderla o tenderla para evitar que la humedad se acumule. Esta regla de los dos o, como máximo 3 usos, sería válida siempre que podamos extender las toallas o bien no vivamos en zonas de mucha humedad. En estos casos, la frecuencia de lavado debería ser menor.
Las toallas de las manos sí que hay que lavarla cada día. Es una toalla que usamos para secarnos las manos después de ir al baño, después de lavarnos los dientes, etc. Es decir, está más expuesta a gérmenes y suciedad así que no nos tiene que dar miedo lavarla con más frecuencia. Al igual que, si tenemos, toalla de bidet.
Hay un indicativo que nos va a servir de alarma perfecta para el lavado, se trata del olor. En el momento que notemos olor a humedad debemos lavar las toallas. Pero no solamente lavarlas, hay que desinfectarlas porque el mal olor es síntoma de presencia de gérmenes. En este caso, te recomendamos que utilices el Desinfectante para Tejidos y Lavadora Bosque Verde.
Cuando vayas a lavar tus toallas con tu detergente habitual, incorpora tres tapones del desinfectante (equivalente a 100ml) en el compartimento del suavizante; programas tu ciclo de lavado habitual pero sin añadir suavizante y acabarás con el 99,9% de las bacterias, hongos y virus H1N1 y, por supuesto, con los malos olores. Al tratarse de un producto sin lejía, no temas si tus toallas son estampadas o de colores, no sufrirán nada. Al contrario, notarás la diferencia.