Trucos con el papel de cocina
Usos conocidos y desconocidos del papel absorbente en tu hogar
Papel absorbente, rollo de cocina, toalla de papel... Muchos nombres para un mismo elemento casi imprescindible en nuestras cocinas. Lo usamos para infinidad de cosas. Te resumimos aquí algunos usos conocidos y otros no tanto que les puedes dar.
Usos del papel absorbente en la cocina:
- Eliminar exceso de aceite en las frituras: quizá es uno de los usos más conocidos. Cuando freímos, por ejemplo croquetas, es imprescindible que las saquemos en un plato cubierto con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite. Truco usado en el 99,9% de los hogares.
- Recoger líquidos: cuando se nos derrama un vaso lleno de agua, lo más rápido y limpio para recoger el agua es, sin duda, el papel de cocina.
- Eliminar el exceso de agua de verduras y frutas: cuando lavamos frutas o verduras, el papel de cocina nos puede servir para eliminar el exceso de agua. Por ejemplo, las ensaladas, cuando las enjuagamos, si no tenemos centrifugadora para ensalada, el papel de cocina es una opción muy útil. O bien cuando, por ejemplo, vamos a cocinar una tortilla de calabacín y lo cortamos en trocitos pequeñitos, un papel de cocina nos servirá para eliminar el exceso de agua a la hora de freír.
- Mantener las frutas y verduras más frescas: este truco no es tan conocido. Si quieres que tus frutas y verduras se mantengan frescas durante más tiempo en el frigorífico, te recomendamos que las guardes en los cajones que las neveras destinan para estos productos. Si, además, "forras" estos cajones con papel de cocina, notarás que aguanta mucho mejor la frescura.
- Congelar pan: sí o sí tienes que usar este truco. Congela el pan envolviéndolo con una hoja de papel de cocina. Atrapará la humedad y evitará que se enmohezca.
- Secar cristales: seguro que lo has probado en casa. Cuando usas productos para limpiar tus espejos y cristales como, por ejemplo, nuestro Limpiacristales y Multiusos Bosque Verde, si los secas con papel de cocina, los dejarás perfectos. A veces, si utilizas paños que dejan fibras o pelusas, no tendrás la misma sensación de limpieza que con el papel de cocina.
- Aceiteras: es un elemento que por más que lo limpies, siempre suele acabar impregnado de aceite. Si tienes la precaución del envolverlo con un pedazo de papel, le dirás adiós a este problema. Y si le acoplas una goma elástica, el papel se quedará fijo y no te molestara.
- Limpiar utensilios de cocina: cuando fregamos cubiertos, pinzas de cocina, tablas de cocinar, etc., para asegurarnos la máxima asepsia posible, podemos utilizar papel absorbente para secarlos en lugar de un paño que puede contener bacterias.
- Evitar el óxido en las ollas y sartenes: para evitar que este menaje se oxide, hay que secarlo muy bien, y si lo haces con papel de cocina (y nos remitimos al punto anterior), será más higiénico y, además, puedes añadir hojas de papel absorbente si las guardas montándolas unas sobre otras para evitar que se generen humedades.
- Pelar el pollo: y atención a este último tip, para retirar la piel del pollo, sujetarlo con un papel de cocina para evitar que resbale es un truco de chef top!!!
Usos del papel absorbente en la cocina:
- Eliminar exceso de aceite en las frituras: quizá es uno de los usos más conocidos. Cuando freímos, por ejemplo croquetas, es imprescindible que las saquemos en un plato cubierto con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite. Truco usado en el 99,9% de los hogares.
- Recoger líquidos: cuando se nos derrama un vaso lleno de agua, lo más rápido y limpio para recoger el agua es, sin duda, el papel de cocina.
- Eliminar el exceso de agua de verduras y frutas: cuando lavamos frutas o verduras, el papel de cocina nos puede servir para eliminar el exceso de agua. Por ejemplo, las ensaladas, cuando las enjuagamos, si no tenemos centrifugadora para ensalada, el papel de cocina es una opción muy útil. O bien cuando, por ejemplo, vamos a cocinar una tortilla de calabacín y lo cortamos en trocitos pequeñitos, un papel de cocina nos servirá para eliminar el exceso de agua a la hora de freír.
- Mantener las frutas y verduras más frescas: este truco no es tan conocido. Si quieres que tus frutas y verduras se mantengan frescas durante más tiempo en el frigorífico, te recomendamos que las guardes en los cajones que las neveras destinan para estos productos. Si, además, "forras" estos cajones con papel de cocina, notarás que aguanta mucho mejor la frescura.
- Congelar pan: sí o sí tienes que usar este truco. Congela el pan envolviéndolo con una hoja de papel de cocina. Atrapará la humedad y evitará que se enmohezca.
- Secar cristales: seguro que lo has probado en casa. Cuando usas productos para limpiar tus espejos y cristales como, por ejemplo, nuestro Limpiacristales y Multiusos Bosque Verde, si los secas con papel de cocina, los dejarás perfectos. A veces, si utilizas paños que dejan fibras o pelusas, no tendrás la misma sensación de limpieza que con el papel de cocina.
- Aceiteras: es un elemento que por más que lo limpies, siempre suele acabar impregnado de aceite. Si tienes la precaución del envolverlo con un pedazo de papel, le dirás adiós a este problema. Y si le acoplas una goma elástica, el papel se quedará fijo y no te molestara.
- Limpiar utensilios de cocina: cuando fregamos cubiertos, pinzas de cocina, tablas de cocinar, etc., para asegurarnos la máxima asepsia posible, podemos utilizar papel absorbente para secarlos en lugar de un paño que puede contener bacterias.
- Evitar el óxido en las ollas y sartenes: para evitar que este menaje se oxide, hay que secarlo muy bien, y si lo haces con papel de cocina (y nos remitimos al punto anterior), será más higiénico y, además, puedes añadir hojas de papel absorbente si las guardas montándolas unas sobre otras para evitar que se generen humedades.
- Pelar el pollo: y atención a este último tip, para retirar la piel del pollo, sujetarlo con un papel de cocina para evitar que resbale es un truco de chef top!!!